$630.000
Omega Seamaster Polaris Analog-Digital, década de 1980.
Omega Seamaster Polaris Analog-Digital, de cuarzo
Omega Seamaster Polaris Analog-Digital, década de 1980.
Esta pieza es cultura, historia. Es un reloj que se encuentra en un nivel distinto al del Omega promedio… El Seamaster Polaris sólo se parece a él mismo, su autenticidad no admite discusión.
Y no es un concepto que le atribuya gratuitamente a este especial Omega, porque su construcción y diseño exigen que así se le califique. Este reloj es derechamente de la combinación acero-oro, pero materializado de una manera única e irrepetible: hasta el día de hoy no queda claro cómo pudo aplicarse de manera tan perfecta esa lámina de oro en la caja, que pareciera ser un dibujo. Pero no es un dibujo enchapado, es una auténtica y notoria lámina de oro, visible si observamos al reloj de costado, más fácil de identificar en el brazalete. Además de este tratamiento de oro tan interesante en su caja y brazalete, tenemos a la mismísima mano dorada detrás de su diseño: el histórico Gérald Genta. Ya podíamos sospechar de su intervención en la línea Polaris sólo viendo a los relojes: brazaletes integrados y esas manecillas que recuerdan inconscientemente al icónico Nautilus. Y señores, otro gran mérito de este invitado: SE TRATA DE LA RAREZA ANÁLOGA DIGITAL. Todo funcionando y sonando sólo con su corona. Se gira, se presiona, se mantiene… casi que cualquier cosa que hagas con la corona configura algo en las múltiples complicaciones del serio calibre 1665 de Omega: alarma, cronógrafo, día, mes, año, calendario perpetuo, temporizador… todo
visible de la manera más nítida a través de su cristal de zafiro.
Así sería entonces este caballero de fines de los 80, una mezcla de virtudes independientes de la maestría y tradición ya sabidas de Omega: UN RELOJ ÚNICO QUE NO VUELVE JAMÁS.
$565.000
$2.690.000
Diseñado por SYDE.CL