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Cultura relojera en su punto máximo… un cronógrafo mecánico Omega DEL AÑO 1940. CERCA DE 84 AÑOS DE MAESTRÍA.

Vamos por parte. Desde siempre que Omega ha sido un pilar puro de relojería suiza, gozando de un privilegio especial aun cuando se trate de un reloj simple de 3 manecillas. Es una cuestión de nivel, de impronta que se entiende sólo con el logo a las 12: Ω.

Sumémosle a este respeto un mérito adicional… señores, tenemos a un CRONÓGRAFO MECÁNICO PRODUCIDO COMPLETAMENTE POR OMEGA. El calibre de este reloj fue producido exclusivamente por Omega bajo el nombre 27 CHRO T1PC, un cronógrafo a cuerda con rueda de pilares que probó su excelencia de la manera más irrefutable posible: funcionando perfectamente hasta el día de hoy. Acumulando y reiniciando puntual a las 12. Una exquisitez de movimiento.

Otra cosa es el diseño… la referencia 2278-2 es clase. Con correa de cuero el reloj es una pieza formal de aquellas. Es auténtico, aún siendo un exponente de la complicación más deportiva de todas, no se molesta en expresar hoy, a 84 años de su nacimiento, una elegancia única… una contradicción que sólo en un reloj así tiene todo el sentido del mundo.

Hay algo entre la ligera pátina de este reloj, algo entre esas finas asas detalladas de su caja, algo en sus 35 milímetros de diámetro… algo en la fusión de toda la estética del reloj que resulta en una pieza seria de vestir. Un cronógrafo vintage así de hermoso tuviera el logo que tuviera a las 12 hubiese sido una belleza, pero es Ω a las 12, es de Omega la manufactura en la mecánica y diseño…

Conclusión: es otra cosa esta reliquia.

 

  • Precio: $1.990.000.
  • Marca: Omega.
  • Período: Año 1940.
  • Modelo/Referencia: 2278-2.
  • Movimiento: Omega 27 CHRO T1PC, a cuerda.
  • Medida de la caja: 35 milímetros sin incluir su corona.
  • Material de la caja: Acero inoxidable.
  • Distancia de asa a asa: 42 milímetros.
  • Distancia entre asas: 18 milímetros.
  • Material del brazalete: Cuero.
  • Accesorios: A no ser que se especifique lo contrario, los relojes no incluyen accesorios. La regla general de los relojes vintage, en específico, es no incluirlos.